Descubrimiento de plantación de iglesias

Evaluación

Evaluación del descubrimiento de la plantación de iglesias

¿Alguna vez has sentido el impulso de empezar algo nuevo? ¿Alguien te ha dicho alguna vez que consideres empezar un nuevo ministerio? ¿Anhelas un contexto eclesial que llegue a personas que probablemente no asistirían a las congregaciones existentes? Esta evaluación gratuita de 29 preguntas te tomará aproximadamente de 10 a 15 minutos y te ayudará a discernir si plantar iglesias podría ser una opción en tu futuro.

Lea cada una de las siguientes afirmaciones y decida qué tan de acuerdo está con cada una según sus creencias y experiencias. Responda según la siguiente escala:

1 = Totalmente en desacuerdo 4 = Ligeramente de acuerdo

2 = Moderadamente en desacuerdo 5 = Moderadamente de acuerdo

3 = Un poco en desacuerdo 6 = Totalmente de acuerdo

Descubrimiento de plantadores de iglesias de Ecclesia

Nombre

Correo electrónico

Teléfono

Ubicación actual

¿Cuál es su puesto/título ministerial actual?

1. Siento un llamado claro y específico de Dios para plantar una iglesia.

2. He pasado una cantidad considerable de tiempo en oración y reflexión sobre mi llamado y lo que viene a continuación en el ministerio.

3. He buscado y recibido una afirmación honesta y específica de mentores espirituales o líderes de la iglesia sabios y confiables con respecto a mis dones y mi llamado.

4. Siento un llamado a un lugar, grupo de personas o comunidad específica.

5. Soy consciente de mis dones y de mis limitaciones cuando se trata del ministerio y de una potencial plantación de iglesia.

6. En términos de dones espirituales, creo que mi don principal es

7. Mi cónyuge y yo estamos de acuerdo acerca de la plantación de iglesias.

8. Puedo contar mi historia de cómo llegué a la fe con fluidez y naturalidad ante una amplia variedad de personas.

9. Participo regularmente en disciplinas espirituales como la oración, la lectura de las Escrituras y la adoración, y actualmente estoy conectado a una expresión de la iglesia local.

10. Escuchar al Espíritu, estudiar las Escrituras y escuchar a quienes forman parte de mi comunidad de fe son formas importantes de discernimiento y toma de decisiones.

11. Creo, y otros han dicho, que soy capaz de atravesar temporadas secas y/o desafíos en mi camino espiritual con fidelidad.

12. Soy capaz de planificar, organizar y ejecutar proyectos o iniciativas complicadas.

13. Puedo pensar fácilmente en ejemplos en los que he implementado con éxito un nuevo sistema o proceso dentro de una organización existente.

14. Soy capaz de pensar en iniciativas fructíferas que he iniciado desde el principio.

15. Puedo identificar fácilmente momentos en los que abordé problemas potenciales antes de que se convirtieran en problemas más importantes.

16. Soy capaz de priorizar tareas y administrar mi tiempo de manera efectiva.

17. Tengo la capacidad de establecer y alcanzar metas a largo plazo.

18. Suelo terminar los proyectos que empiezo.

19. Otros dirían que soy capaz de recibir bien la retroalimentación y usarla para mejorar los sistemas y procesos.

20. Puedo aprender de mis éxitos y fracasos tanto personales como ministeriales en mi vida.

21. Tengo una sólida comprensión de las Escrituras y de la misión de Dios, y soy capaz de comunicarlo de una manera relevante, eficaz y accesible.

22. Soy capaz de inspirar y motivar a otros a unirse y apoyar una visión del reino.

23. Tengo experiencia en liderar y convocar grupos hacia una visión y misión mayor.

24. Soy capaz de comunicar el mensaje del evangelio con claridad y ayudar a otros con diversos orígenes y contextos a comprender su relevancia para nuestras vidas.

25. Soy capaz de evaluar de manera apropiada y humilde mi eficacia comunicativa y de liderazgo.

26. Me siento cómodo tomando riesgos valientes por el reino.

27. Me siento cómodo pidiendo a otros que se unan a mí en la misión del Reino, tanto como miembros de algo nuevo como donantes financieros y de oración.

28. Tengo un alto umbral de incertidumbre y riesgo en las decisiones relativas a la fe.

29. Soy capaz de mantener mi fe y confianza en el Señor durante momentos de desánimo e incertidumbre.

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